Interpreté de nuevo las noches y las auroras.
Sin tanta rapidez sin tanta locura.
Con más otoños en mis ojos.
Con todas las entrañas puestas en la mirada.
Dejé las ansias, no del todo, es cierto.
Pero hay llamadas que ya no escucho.
Me habré moderado, me habré muerto?
Creo que ahora estoy mucho más vivo.
Y extiendo mejor las ideas por el mundo.
Pobre iluso, infeliz buscando la luz.
Me duelen las esperanzas pero las conservo.
Ahora tengo más ganas de ser feliz.
Siento que me uniré al cielo
para fundirme por completo en ti.
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