Días tenebrosos,
mojados,
de recuerdos ingratos
y de realidad.
Días
como tantos otros
que pasaron,
como otros que vendrán.
Ya está bien
de tontear con los sabores,
ya está bien.
Pero,
qué otra cosa
hacemos en la vida
sino jugar con la sensaciones.
Lluvia,
y los ojos perdidos
en las lápidas
buscando tu nombre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario