Raymond Carver trabajando |
Muy metido en Carver.
Pensativo con mis cosas.
Ella me preguntaba
lo de siempre.
Yo respondía lo mismo.
La misma ilusión rutinaria.
El sexo deprimido.
La angustia sin palabras.
Las palabras sin boca.
Si la miro la entiendo.
Pero me cansé de comprender
absolutamente todo.
Me agoté de miserable.
A veces me hundo
en los sueños.
Y le veo sí, le veo,
con las mismas historias que yo.
Lo siento tan adentro,
que a veces pienso
si no estoy obsesionado
o completamente cuerdo.
Una mezcla perfecta de cordura y sensatez, eso es un poeta no?
ResponderEliminarUn abrazo.