Venido del lujo
para rebuscar en los silencios.
Llegado de la tierra agreste
para adentrarme rebelde
en tu sangre.
Necesito tu hambre devorándome.
Quiero tu sed haciéndome desierto.
Venido de muy adentro
para llegarte más profundo.
Tu sed deseándo mi boca
entreabierta.
Tus pómulos enrojecidos de pudor
por no poder decir lo que sientes.
Pero tus gestos llamándome a gritos.
Con todas las imposibles esencias
que se desgarran en el fondo de los deseos.
Eso es un amor infinito.
ResponderEliminarE imposible.
Jooo, mi niño...qué bien escribes !!!